¿Tienes en mente crear una tienda online para mejorar tu presencia en el mercado? ¿No sabes por dónde empezar? ¡Estás en el lugar perfecto! Ya que en la entrada de hoy vamos a mostrar cómo montar una tienda online paso a paso, veremos las características de este modelo y sus principales ventajas y desventajas. Pero antes, déjanos que empecemos por el principio y te expliquemos qué es el e-commerce.
El e-commerce o comercio electrónico es un sistema de compraventa de productos y servicios a través de Internet, que utiliza como forma de pago la tarjeta de crédito o PayPal. En la última década ha experimentado un considerable crecimiento en España, que en 2020 se sitúa como el cuarto país de Europa en número de transacciones digitales. Esto es debido a las facilidades que nos brinda las nuevas tecnologías, por lo que cada vez son más las empresas que deciden expandir su negocio en la red.
Lo primero que debes hacer es elegir un nombre para el dominio donde montarás tu tienda virtual. La idea es que sea lo más corto posible, muy descriptivo y que incluya las palabras clave que quieres posicionar, como por ejemplo taller o reparaciones. Te recomendamos que escojas un dominio .com, ya que con un .es solo podrás vender en territorio español.
A continuación, llega el momento de adquirir un hosting. No escatimes gastos, ya que tu comercio online debe ser estable y tener una conexión rápida, algo que esta directamente relacionado con el posicionamiento en los motores de búsqueda. De hecho, Google penaliza fuertemente a las webs que tardan más de cierto tiempo en cargar.
Los gastos se reducen básicamente al hosting y la contratación de servicios posteriores, como programadores que se encarguen de la arquitectura de tu e-commerce y profesionales de SEO que garanticen su visibilidad. En este sentido, podrías considerar hacerte con un Dropshipping, sistema que permite a los distribuidores enviar directamente los productos a aquellos clientes que compren en nuestra web.
O un CMS especialmente diseñado para comercios electrónicos. Algunos tienen código abierto o son gratuitos, por lo que se pueden modificar para adaptarse a las necesidades de cualquier negocio por un precio muy asequible. Algunos ejemplos muy populares son Oscommerce o Wordpress, aunque si lo que buscas es facilidad de uso te aconsejamos que le eches un vistazo a Jumpseller.
Tu tienda online ya está casi lista, solo queda subir los productos de tu catálogo con descripciones que sean muy atractivas y originales, algo que aumentará notablemente el grado de conversión de tus usuarios. Y recuerda añadir varios de métodos de pago, así como la opción de contrarrembolso, ya que todavía en la actualidad hay algunas personas que desconfían de las transacciones online.
Vale, ya hemos montado nuestro sitio web y hemos incluido el catálogo de productos y servicios. ¿Ahora me siento a esperar? ¡No! Ahora empieza una nueva tarea, que es posicionar tu tienda online para que aparezca en la primera página de los buscadores. Para ello, será indispensable que lleves a cabo una campaña de e-marketing.
También es muy recomendable que crees un blog corporativo, donde podrás publicar artículos de valor para tus potenciales compradores. Así como noticias de la actualidad del sector e información sobre tu marca. El objetivo es que la comunidad te conozca cuanto antes, se identifique con los valores de tu empresa y aumente su fidelidad.
Los comercios digitales son muy distintos a los físicos. Para empezar, los productos no se pueden comprar ni probar. Por lo que es necesario contar con buenas fotos y descripciones exactas, así como las opiniones de otros usuarios que ya lo hayan usado. Además, la atención al cliente suele ser más fría, ya que se realiza por chat o el teléfono.
También es necesario tener artículos en stock, a menos que adquieras un servicio de Dropshipping como el que hemos comentado. Por lo que, dependiendo de tu sector, necesitarás un almacén con suficiente espacio para guardar todos los productos. Pero cuentan con la gran ventaja de disponer de una enorme variedad de marcas, algo que en muchas ocasiones es imposible para las tiendas físicas.
Los comercios online tampoco tienen horarios, por lo que están abiertos las 24 horas del día durante los 365 días del año. Y permiten tener presencia a nivel internacional, factores que te ayudarán a aumentar las ventas. Sin olvidarnos de la importante labor de promoción de nuestra marca y los costes tan reducidos que tiene la inversión, que en la mayoría de los casos le dará un nuevo impulso a tu empresa.
¿Desventajas? Si acabas de montar tu tienda virtual, tendrás que competir con otras marcas que son muy populares y llevan años asentadas. Para destacarte de los demás es indispensable que lleves a cabo campañas de marketing originales dirigidas a un target especifico. Y como hemos comentado, que cuentes con la ayuda de profesionales en SEO.
Tampoco podemos descuidarnos ni un momento, ya que las tecnologías digitales evolucionan a pasos agigantados y podríamos quedarnos atrás en cuestión de meses. Por lo que es vital actualizar la web cada cierto tiempo. Pese a todos estos inconvenientes, crear una tienda virtual es muy recomendable, ya que con muy poco esfuerzo dispondrás de un inmenso escaparate para tus productos y servicios.
Si quieres más información sobre este tema, te dejamos con esta entrada de nuestro blog en la que hablamos de los 7 modelos de negocio online rentables para emprender con éxito. Para que así puedas tener una de las mejores tiendas online del momento. ¡Hasta la próxima!