Los mercados emergentes son sinónimo de oportunidades laborales, algo que cualquier emprendedor tiene claro que supone la base de un éxito empresarial. Para las startups que están empezando o, incluso, para los emprendedores que están desarrollando su idea de negocio, encontrar estos mercados puede ser clave en su futuro.
Obviamente lo difícil es encontrar mercados emergentes, dado que si todo el mundo supiera cuáles son no sería tan rentable. Para conseguirlo se deben juntar una serie de factores, como estar en el momento adecuado, con el conocimiento necesario y una idea acertada.
No obstante, el azar tiene menos que ver que la oportunidad, por lo que a continuación os indicamos algunos consejos para poder encontrar estos mercados emergentes más fácilmente.
Eventos de networking, congresos y ferias siempre son recomendables, entre otras cosas porque presentan a los asistentes las innovaciones del sector, la evolución a la que se dirige y, en el caso de tener claro que se trata de un mercado con posibilidades, plantearán oportunidades de mercados emergentes complementarios que pueden aprovecharse.
Hay sectores que siempre ofrecerán oportunidades comerciales interesantes. Por ejemplo, el sector automovilístico no solo va a tener muchas opciones de rentabilidad, sino que está en una evolución permanente ligada a la tecnología en muchos sentidos, desde la conducción autónoma hasta el control del vehículo con elementos digitales.
Este tipo de sectores comerciales siempre van a tener la puerta abierta a nuevos mercados emergentes, pero hay que tener el suficiente conocimiento de los mismos, para poder desarrollar una idea válida tanto funcional como comercialmente.
Gracias a un conocimiento del sector, podemos identificar los mercados emergentes que ya se han dado a conocer. En estos casos no vamos a ser pioneros en el mercado, pero sí que podemos mejorar cualquier desarrollo actualmente disponible, entre otras cosas porque estará en sus inicios.
Normalmente los emprendedores que optan por esta vía no lo hicieron desde el principio, sino que se encuentran con una startup o idea de negocio, que ve aparecer una oportunidad comercial ante sí en su aplicación práctica y, por tanto, mejoran mercados emergentes ya existentes y los impulsan todavía más.
No siempre una startup aprovecha un mercado emergente, sino que a veces sucede al revés, que esta idea de negocio impulsa el desarrollo de un mercado hasta que le motiva a aparecer. Es el caso sobre todo de la tecnología en desarrollo.
Si tenemos una idea de negocio que puede servir para impulsar una tecnología todavía no aplicada en la práctica o que sigue buscando su crecimiento, podemos convertir nuestra startup en proveedores de las empresas relacionadas, ya sea con productos o servicios que mejoran el uso práctico de la misma.