La dirección estratégica de la empresa


El mercado actual se ha vuelto más exigente que nunca para las empresas. No solo es necesario buscar inversores y estar al día en la legislación, también tenemos que adaptarnos a la nueva realidad digital y transformar nuestra idea de negocio para alcanzar el éxito. Como ves, se trata de decisiones muy importantes que requieren toda la ayuda posible.

Por ello, en la entrada de hoy vamos a hablar de la dirección estratégica de las empresas. Conoceremos la importancia de la estrategia corporativa. Cómo se segmentan los mercados. Y todo lo que debes saber para sacar adelante tu proyecto. ¡Comenzamos!

La importancia de la estrategia corporativa

La dirección estratégica se divide en 3 fases principales, compuestas por la definición de objetivos, la planificación estratégica y la implementación estratégica. Lo primero es establecer los objetivos a corto y largo plazo. A continuación, elegimos el plan de actuación más adecuado. Y finalmente, llevamos a cabo todas las operaciones necesarias para hacerlos realidad.

Este concepto empezó a ganar popularidad a partir de la década de los 80 del siglo pasado. Es de vital importancia para saber qué hacer, cómo, cuándo y quién será el encargado. La toma de decisiones se extiende a los directivos de todos los niveles. Pero la última respuesta la tiene siempre el consejo de administración, que se encargará de determinar la filosofía de la empresa.

De esta forma, la estrategia corporativa de la empresa proporciona una única dirección a todas las acciones. Define de forma clara el futuro de la compañía y la posición que ocupará en el mercado. Sabremos cuál es el target al que nos dirigimos y la principal competencia que tenemos en el sector. Así como los valores que nos definen y la forma en la que nos relacionaremos con el público.

¿Cómo segmentar el mercado en el que vas a vender?

Los segmentos de mercado están formados por conjuntos de consumidores que tienen intereses y necesidades comunes. Por lo tanto, van a reaccionar forma parecida a ciertas estrategias empresariales. Si quieres llevar a cabo un plan corporativo eficaz, será indispensable que identifiques el segmento al que pertenece tu empresa. Y a continuación, desarrolles una estrategia de marketing adaptada a sus necesidades.

Este plan debe ser medible. Es decir, que necesitamos saber el número de personas que forman parte del segmento y sus características. También accesible, ya que de nada sirve crear una estrategia perfecta si no cuentas con los recursos para llevarla a cabo.

Por su parte, los segmentos deben ser sustanciales. O dicho de otra forma, lo suficientemente amplios como para ser rentables. Y también accionables. De forma que una vez afianzados en un sector podamos llegar a otros sin demasiados problemas.

Como ves, la segmentación del mercado se basa en subdividirlo en sectores más concretos. Para así determinar cuál de ellos resulta más atractivo para nuestro negocio. Y posteriormente, llevar a cabo campañas publicitarias y estrategias empresariales personalizadas. Para así optimizar los recursos disponibles, aumentar las ventas y fidelizar a los clientes.

Cómo hacer un estudio de mercado

¿Cómo obtenemos la información necesaria para segmentar el mercado y crear una estrategia empresarial rentable y efectiva? Los estudios de mercado son una opción bastante habitual en nuestros días. Son esenciales para reducir el riesgo de un nuevo proyecto o mejorar el funcionamiento de otros que tengas en marcha. Crear una empresa sin un estudio de mercado supone un enorme riesgo. Ya que a veces tus pensamientos y la realidad pueden ser bien distintas. De hecho, no contrastar estos datos es el principal motivo por el cuál muchos negocios no llegan a superar los 6 meses de vida.

No caigas en la tentación de intentar hacer realidad una buena idea sin investigar antes el mercado y conocer las características de los consumidores. Sigue una metodología sólida, utilizando programas y aplicaciones profesionales. Selecciona una meta, target específico y las herramientas que necesitarás para desarrollarla. ¿No tienes demasiada idea de marketing digital? Entonces lo mejor es que contrates a una empresa especializada en estos servicios. La inversión ronda los 3.000 euros y merecerá la pena hasta el último céntimo.

La estrategia corporativa y saber hacia dónde vamos

El objetivo de una empresa es producir bienes o servicios a cambio de una contraprestación económica. Pero antes de comenzar a desarrollar nuestros planes corporativos, tenemos que tener muy claro dónde estamos y hacia dónde queremos ir. Tomar medidas de última hora sin planificación a largo plazo quizás sirva para solucionar un problema inminente. Pero estaremos dando palos de ciego que con el paso del tiempo comprometerán el futuro de nuestro negocio.

¿No tienes tiempo para todo? En ocasiones, es buena idea contratar a un auditor externo para solucionar una situación imprevista y centrar todos los esfuerzos disponibles en la planificación. Cuando determines tu camino, rodéate de profesionales cualificados que aporten su experiencia. Fija unas metas asumibles a corto y medio plazo, que nos permitirán más adelante conseguir los objetivos fijados.

Analiza la realidad cambiante de tu sector y sé el primero en adaptarte a todos los cambios. No tengas miedo a innovar y no olvides nunca la importancia de una buena comunicación. Tanto interna como externa. Solo así podrás aprovechar al máximo los recursos de tu negocio y crear una estrategia corporativa que te lleve directo al éxito.