Los cibercriminales suponen una gran amenaza en un mundo hiperconectado como el actual. Según Cybersecurity Ventures, el cibercrimen le costará al mundo 6 billones de dólares anuales para 2021, una cifra mayor a la entregada por el comercio mundial de todas las principales drogas ilegales combinadas.
La ciberseguridad se ha vuelto vital.
La digitalización, cada vez mayor en el planeta, hace que sea fundamental que todas las empresas tengan preparado un plan estratégico de ciberseguridad. De esta manera, podrán evitar al máximo los posibles ataques hechos por ciberdelincuentes. ¿Cuáles son las herramientas principales?
En primer lugar, cabe destacar que para cualquier empresa es primordial conocer la actividad que se está produciendo en su red informática y así poder detectar las actividades sospechosas realizadas por parte de los ciberdelincuentes.
Así, las herramientas de ciberseguridad son la mejor respuesta a esta necesidad y es que no solo son eficientes en la identificación y análisis de ataques, sino que también permiten una respuesta contundente en el momento idóneo.
“Para prevenir un ciberataque es necesario contar con una poderosa infraestructura de TI (entre otras cosas) que te ayude a detectar y frenar amenazas”
“La ciberseguridad para empresas es una realidad y preocupación constante, pues los ataques virtuales pueden llegar a ser tan catastróficos como un robo o un incendio”, dicen los expertos de IBM.
“Para prevenir un ciberataque es necesario contar con una poderosa infraestructura de TI (entre otras cosas) que te ayude a detectar y frenar amenazas”, añaden en un reciente informe.
¿Por qué es importante tener herramientas de ciberseguridad en tu empresa? Los datos de un estudio de CISCO comentan que el cibercrimen es relativamente más rentable que todas las operaciones combinadas del tráfico de drogas en el mundo.
En la Dark Web se pueden conseguir herramientas profesionales de hackeo de todo tipo. Además, una investigación de Netscout, afirma que solo se tardan 5 minutos en hackear un dispositivo de IOT no protegido.
Según IBM, solo el 38% de las empresas a nivel mundial han declarado estar equipadas y preparadas para responder efectivamente frente a ciberataques de gran magnitud.
Mientras, de acuerdo con una encuesta de AttackIQ, realizada a 577 profesionales de TI y seguridad de TI en los Estados Unidos, arrojó que el 53% de las empresas no saben si sus herramientas de ciberseguridad funcionan y no están completamente seguras de que eviten las violaciones de datos. Los números hablan por sí solos.
Teniendo en cuenta este telón de fondo, hay algunas prácticas que se pueden hacer, según opinan algunos expertos en ciberseguridad. Es el caso de Francisco Fernández, gerente general de AVANTIC, que recomienda, preventivamente, proteger los equipos informáticos.
Cualquier dispositivo electrónico que se tenga en casa o la oficina debe estar completamente actualizado.
“Las clásicas actualizaciones del sistema pueden ser molestas, pero son fundamentales pues muchas corrigen agujeros de seguridad (…) Además, debe contarse con antivirus y antimalware que sean avalados por la comunidad a la hora de detectar archivos maliciosos”, considera.
Contar con contraseñas fuertes es otra de las estrategias que se pueden poner en marcha. “Ni el nombre de nuestros hijos, ni el de nuestra mascota, ni el equipo de fútbol favorito”, opina Fernández.
Por supuesto no poner solo números y que encima estén relacionados con la contraseña de otro tipo de cuenta como puede ser la bancaria. Siempre hay que combinar números, letras mayúsculas, minúsculas y símbolos. “De esta forma es más difícil conseguirlas y que no aparezcan en librerías estándar”, añade.
A ello hay que sumarle que se pueden utilizar protocolos de seguridad para mejorar todos los procesos.
“Es un paso imprescindible pues, de lo contrario, las transferencias de archivos a un servidor pueden volverse completamente vulnerables”, concreta Fernández. Si además se accede o se mandan datos a través de fuentes desconocidas o sitios de poca confianza, se está facilitando el ciberataque.
Y hay más: comprobar la autenticidad de enlaces y perfiles puede resultar de gran utilidad para las empresas. Es muy común sufrir ataques a través de phishing mediante el cual se intenta adquirir información confidencial de forma fraudulenta, normalmente a través del email.
“Hoy en día en las redes sociales se crean perfiles falsos para captar estos datos, sobre todo por medio de cuentas no oficiales de empresas con el fin de engañar”, ejemplifica el experto.
Asimismo, evitar revelar datos personales puede ser de gran ayuda, así como denunciar a las autoridades ante cualquier anomalía. Principalmente en las propias redes sociales y en cualquier tipo de página web que no sea de fiar.
“Lo recomendable es solo utilizarlos cuando sea indispensable, pero, aun así, grandes compañías han sufrido el robo de información de sus clientes por lo que no hay una seguridad máxima para esta cuestión”, argumenta Fernández.
También hay que tener constancia de con quién compartimos nuestra información en la red, sea a través de imágenes o texto.
Por tanto, siempre que nos encontremos con un contenido que no sea adecuado o con una página que pueda suponer un riesgo para el usuario, lo mejor es denunciarlo a la policía o cuerpos encargados de este tipo de procesos. De lo contrario, se está permitiendo que sigan operando contra el sistema cibernético.
Los cibercriminales no son un problema menor en un mundo hiperconectado como el actual.
Según Cybersecurity Ventures, el cibercrimen le costará al mundo $ 6 billones anuales para 2021, una cifra mayor a la entregada por el comercio mundial de todas las principales drogas ilegales combinadas.
Tirando de este mismo hilo, la realidad es que hay herramientas concretas que pueden ayudar a los negocios a tener una mayor ciberseguridad. Una de ellas es la conocida como PKI son las siglas de Public Key Infrastructure (Infraestructura de clave pública).
Esta herramienta admite la distribución e identificación de claves de cifrado públicas. Permite a los usuarios y sistemas informáticos intercambiar datos de forma segura a través de Internet y verificar la identidad de la otra parte.
También es posible intercambiar información confidencial sin PKI, pero, en ese caso, no habría garantía de autenticación de la otra parte.
Muchas personas asocian PKI con SSL o TLS. Esta es la tecnología que encripta la comunicación del servidor y se encarga de HTTPS y candado que podemos ver en la barra de direcciones de nuestro navegador. PKI resuelve muchos problemas de ciberseguridad y, por eso, es fundamental hacerle un hueco en tu empresa.
“Se trata de un sistema de recursos, políticas y servicios que da soporte al uso de cifrado de claves públicas para autenticar a las partes que participan en una transacción”
En definitiva, según IBM, “se trata de un sistema de recursos, políticas y servicios que da soporte al uso de cifrado de claves públicas para autenticar a las partes que participan en una transacción”.
Proporcionan los siguientes servicios: emisión de certificados digitales; validación de certificados digitales; revocación de certificados digitales; y distribución de claves públicas.
¿Qué pueden hacer las empresas de cualquier tamaño para proteger sus activos intangibles como datos e información crítica? Integrar en sus procesos herramientas de seguridad informática que le permitan reducir los riesgos e incertidumbre frente a los delitos de esta categoría.
Por otra parte, los ciberdelincuentes de hoy en día utilizan técnicas y software más avanzados para quebrar la seguridad de las empresas. Así, es necesario que todas las organizaciones utilicen las mejores herramientas de ciberseguridad.
En este sentido, MDR es un servicio de seguridad avanzado que proporciona búsqueda de amenazas, inteligencia de amenazas, monitoreo de seguridad, análisis de incidentes y respuesta a incidentes.
Es un software que surge de la necesidad de las organizaciones con pocos recursos de ser más conscientes de los riesgos y mejorar su capacidad de detección y respuesta a las amenazas.
“MDR también utiliza inteligencia artificial y aprendizaje automático para investigar, detectar amenazas automáticamente y orquestar la respuesta para obtener resultados más rápidos”, comenta Fernández.
Otra de las herramientas para mejorar la ciberseguridad tiene que ver con el pentesting o test de penetración. Es una de las mejores formas de evaluar los sistemas de seguridad de nuestra empresa y la seguridad de una infraestructura de TI, ya que intenta aprovechar las vulnerabilidades de forma segura.
“Estas vulnerabilidades existen en sistemas operativos, servicios y aplicaciones, configuraciones incorrectas o comportamientos de riesgo del usuario final”, cuenta Fernández.
En las pruebas de penetración, los expertos en ciberseguridad utilizarán las mismas técnicas y procesos que usan los piratas informáticos para detectar posibles amenazas y áreas de debilidad.
En resumen, consiste en atacar diferentes entornos o sistemas con el objetivo de detectar y prevenir posibles fallos. Se trata de una técnica para encontrar aquellos errores en el sistema.
“Gracias a este tipo de exámenes las empresas pueden poner remedio a sus debilidades antes de que lo hagan los ciberdelincuentes”
“Es una de las prácticas más demandadas actualmente, ya que gracias a este tipo de exámenes las empresas pueden poner remedio a sus debilidades antes de que lo hagan los ciberdelincuentes”, ahonda el experto.
Un pentester es un auditor de seguridad informática. Se dividen en dos: red team, la parte más ofensiva; y blue team, la parte defensiva
Son útiles por diferentes razones. En primer lugar, porque determinan qué posibilidad de éxito podría tener un ciberataque, qué vulnerabilidades de mayor y menor riesgo tiene la empresa, cuáles de ellas pueden poner en riesgo a la organización y cuáles son casi imposibles de detectar.
También comprueban la capacidad y la eficiencia de los informáticos a la hora de responder a posibles ataques.
Pero hay que tener en cuenta otros conceptos que pueden ser interesantes para mejorar la ciberseguridad de una empresa.
Por ejemplo, de acuerdo con una encuesta de AttackIQ, realizado a 577 profesionales de TI y seguridad de TI en los Estados Unidos, el 53% de las empresas no saben si sus herramientas de ciberseguridad funcionan y no están completamente seguras de que eviten las violaciones de datos.
Por ello, es fundamental que se conozcan los principales medios tecnológicos para hacer frente a los ataques cibernéticos.
Es necesario, en este sentido, contar con un buen software de antivirus. Todos los ordenadores conectados a la red -personales y corporativos- deben contar con uno para evitar cualquier daño a futuro.
Este tipo de programas permite contar con medidas de protección efectivas ante la detección de malware u otros elementos maliciosos, por medio de ofrecer la posibilidad de eliminar las posibles amenazas o poner al dispositivo en estado de “cuarentena”.
Dentro del mercado, existen soluciones que integran diferentes funcionalidades adaptables a las necesidades de cada organización. Sin embargo, es importante que la que se adopte cuente con las actualizaciones pertinentes para así no quedar caducas ante nuevas amenazas.
Además, un firewall perimetral de la red también es de gran utilidad. Es una de las herramientas de ciberseguridad más recomendadas. Su funcionamiento es simple: escanea los paquetes de red, permitiéndolos o bloqueándolos según las reglas definidas por un administrador.
Si bien es cierto que su estructura es básica si se compara a la sofisticación de las amenazas, se pueden encontrar firewalls modernos que pueden clasificar los archivos utilizando varios parámetros.
Así, se puede inspeccionar con eficiencia el tráfico web, identificar a usuarios, bloquear el acceso que no está autorizado, entre otras acciones.
Por su parte, un proxy es algo que tener en mente. ¿En qué consiste? Básicamente, es un dispositivo o programa informático que actúa como intermediario entre las conexiones del navegador e Internet, filtrando todos los paquetes entre ambos.
Está catalogada como una de las buenas herramientas de seguridad informática debido a que, por medio de ella, se puede bloquear sitios web que se estimen como peligrosos o prohibidos dentro del ambiente laboral.
En resumen, las empresas pueden contar con distintos recursos en ciberseguridad en aras de capear los futuros temporales causados por los ciberdelincuentes. Cuanto antes se pongan cotos ante una de las grandes amenazas de la era digital, mejores resultados a largo plazo se conseguirán.