La digitalización continúa transformando todos los sectores de la economía, y uno de los cambios más importantes que se avecina para autónomos y empresas pequeñas en España es la adopción obligatoria de la facturación electrónica. Nosotros te contamos todas las claves.
Este cambio, aunque complejo, ya que conlleva una serie de cambios en la interfaz de las empresas, puede ser beneficioso para las mismas. Pues la digitalización de las facturas trae consigo su automatización, y esto ayudara a las empresas a ser más eficaces y a reducir errores.
En 2027 como muy tarde pymes y autónomos estarán obligados a facturar de manera electrónica sus operaciones con otros autónomos y operaciones B2B. Esta implementación de hacienda se ha pensado para prevenir la morosidad en las relaciones comerciales.
¿Eres autónomo y no te queda claro lo que es la facturación electrónica? ¿No sabes si es obligatorio para tu negocio implementar este modelo de facturación? Esas y otras dudas son las que trataremos en este artículo para dar un poco de luz a esta situación tan compleja.
La factura electrónica es un documento digital que cumple con todos los requisitos legales de una factura tradicional en papel. Tiene la misma validez jurídica, pero con una diferencia clave, se emite, recibe y almacena en formato electrónico.
Esta herramienta no es nueva, muchos profesionales y empresas ya utilizan este tipo de documentos. Sin embargo, la nueva normativa amplía su uso obligatorio a todas las relaciones comerciales entre empresas y autónomos, así que es hora de digitalizar la facturación de tu empresa.
La obligatoriedad de la facturación electrónica viene regulada por la Ley 18/2022, de 28 de septiembre, más conocida como Ley Crea y Crece, que tiene como objetivo fomentar el crecimiento empresarial, reducir la morosidad y promover la digitalización.
Una de las claves de esta ley es establecer que todas las empresas y autónomos, en sus operaciones B2B, deberán emitir y recibir facturas electrónicas. De esta manera se aseguran transiciones limpias entre las diversas entidades.
Aunque la ley ya ha sido aprobada, su aplicación efectiva depende de la publicación del Reglamento de desarrollo, que establecerá los detalles técnicos y operativos. Una vez publicado ese reglamento en el BOE, comenzará a correr el calendario de plazos obligatorios:
Para las grandes empresas, esas cuya facturación anual supera los 8 millones de euros, el plazo para implementar este método de facturación es hasta un año después de la publicación del reglamento.
Es decir, si el reglamento se publica el 1 de julio de 2025, su plazo finaliza el 1 de julio de 2026. Para las pymes y los autónomos el plazo es diferente.
Los autónomos cuentan con dos años después de la publicación del reglamento para adoptar esta nueva medida, ya que la cotización de autónomos es diferente a la de las empresas. Es decir, si el reglamento se publica el 1 de julio de 2025, su plazo finaliza el 1 de julio de 2027.
Este cambio, aunque aparentemente innecesario, está planteado para mejorar el sistema de facturación de España, para hacerlo un sistema más organizado e intuitivo para el usuario.
Los objetivos principales que se han propuesto para implementar la facturación electrónica son:
Esta medida afectará a todas las empresas y a los autónomos que emitan facturas de relaciones comerciales con otras empresas o autónomos, lo que en el mundo de los negocios se conoce como B2B. Por ahora, no afectará a las facturas emitidas por la venta a consumidores.
Si eres autónomo y facturas a otra empresa deberás emitir esa factura en formato electrónico, y la otra parte debería hacer lo mismo.
No importa el volumen de facturación ni el sector económico al que pertenezcas, la normativa será universal para todas las actividades económicas.
Más allá de ser una obligación legal, la facturación electrónica aporta numerosos beneficios para las pymes y los autónomos. Ayuda a reducir los errores de los humanos, porque automatizar procesos se eliminan los errores de transcripción.
También ayuda a ahorrar espacio y costes, ya que se reducen los gastos de impresión, envío y el espacio que ocupa el archivo físico.
Además, implica facilidades con el cobro, porque al tener un mayor control sobre la emisión y recepción de facturas, es más fácil gestionar los cobros y pagos.
La facturación electrónica no es solo una nueva obligación, sino una buena oportunidad para modernizar y hacer más eficiente la gestión administrativa de autónomos y empresas.
Con la publicación del reglamento inminente y los plazos ya definidos, el momento para prepararse es ahora. Aprende como hacer una factura electrónica, y digitaliza los cobros de tu empresa para mejorar su eficiencia.
Si como autónomo o propietario de una pyme, tienes más cuestiones que te preocupen, en Yoigo Negocios ponemos a tu disposición toda la información que necesitas. Solo tienes que entrar en nuestra web o llamar al 900 622 500.