En nuestro país, los territorios rurales pierden siete habitantes cada hora, según el censo del Instituto Nacional de Estadística (INE). En España hay un total de 8.000 municipios, de los cuales la gran mayoría -7.000- cuentan con menos de 5.000 habitantes, un número que cada vez va más en descenso. De hecho, los pueblos españoles han perdido casi 62.000 personas durante el último año.
Con los datos anteriores, es posible afirmar que los españoles prefieren vivir en las ciudades. La gran mayoría -el 90%- de la población vive en el 30% de la superficie del país. Ante esta situación, el Gobierno propone ciertas medidas para intentar atraer a los españoles al medio rural. Es esencial que los pueblos tengan las mismas herramientas tecnológicas que en las ciudades para que la brecha digital sea inexistente. Para ello han ideadoel Plan 300x100 al que han destinado 525 millones de euros y con el que pretenden llevar lafibra óptica de 300 Mbits/s a todos los núcleos de la población de España.
Otro de los ejemplos que presenta el Gobierno son unos términos especiales -y más ventajosos- para los emprendedores que decidan llevar a cabo su negocio en poblaciones menores de 5.000 habitantes.
Condiciones para autónomos rurales
El pasado 1 de agosto de 2018 entró en vigor la nueva tarifa plana para autónomos, fue aprobada en losPresupuestos del Estado de 2018. Con esta medida, los profesionales por cuenta propia obtendrán un impulso para iniciar su carrera profesional ya que se ahorrarán un total de 5.520 euros a lo largo de los 24 meses de vigencia de la tarifa plana.
La ayuda está basada en una ampliación de latarifa plana de 50€ de los emprendedores que comienzan a llevar a cabo su negocio por cuenta propia durante 24 meses. Además, si se trata de un autónomo menor de 30 años o en caso de ser mujer, menor de 35, se aplicará un descuento adicional del 30% sobre la cuota por contingencias comunes durante el tercer año de actividad profesional.
Los requisitos para poder obtener la bonificación son los siguientes:
Estar empadronado en un municipio
Es una condición indispensable que el trabajador por cuenta propia esté empadronado en un municipio de menos de 5.000 habitantes, según el padrón municipal vigente en la fecha en la que el autónomo se da de alta en la Seguridad Social.
Cursar una alta nueva en Hacienda
El emprendedor debe darse de alta en el Censo de Obligados Tributarios de la Agencia Estatal de Administración Tributaria. Debe figurar la población donde se va a desarrollar la actividad para que la Administración pueda confirmar con el municipio todos los trámites para hacer posible la bonificación.
Cursar una alta nueva en el RETA
El RETA es el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos en el que cualquier trabajador que quiera llevar a cabo su actividad profesional por cuenta propia tiene que estar registrado. Aquellos que quieran disfrutar de la bonificación por emprender en el ámbito rural deben haberse dado de alta en el RETA después del 1 de agosto de 2018, fecha en la que se comenzó a implementar la medida por el Gobierno. No es una propuesta de carácter retroactivo, por lo que los autónomos que se hayan dado de alta anteriormente no pudieron beneficiarse de las ventajas del plan.
Como condición especial, no podrán optar a esta medida aquellos autónomos españoles que hayan estado afiliados al RETA durante los dos últimos años anteriores a la fecha del alta.
Mantener la actividad
El negocio debe estar activo, al menos, durante los dos primeros años para poder beneficiarse de la ayuda que ofrece el Estado.
Permanecer empadronado
Desde el momento en el que el trabajador por cuenta propia se da de alta en la Seguridad Social debe permanecer empadronado en el pueblo durante, al menos, cuatro años.
Es importante cumplir con todos los requisitos necesarios para obtener la bonificación por parte del Estado, puesto que, de no ser así, el autónomo deberá devolver el dinero que hayan ahorrado con esta medida.
Proyectos rurales
EnPienso, Luego Actúo hemos podido conocer algunas ideas que están llevando a cabo personas en el medio rural y que ayudan a prosperar a los municipios en los que se desarrollan.
Música en la España rural
Daniel Broncano nació en una de las zonas rurales más despobladas de España, en la Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas (Jaén). Profesionalmente es un clarinetista que ha recorrido el mundo llevando su música consigo. Ahora vuelve a su pueblo con el festival Música en Segura con la intención de llenar de música y de gente este rincón de la provincia de Jaén.
Daniel celebra el evento en el mes de mayo y congrega a músicos de todas partes de España y de Europa, de todas las modalidades: clásicos, flamencos, jazz… Hasta ahora, han conseguido dar a conocer la Sierra de Segura a nivel internacional y ser un ejemplo de emprendimiento sociocultural en la periferia rural. Desde 2014, que se celebra el festival, han acudido al evento 22.500 personas de todos los rincones del mundo.
Su objetivo es alcanzar a 15.000 personas anualmente y consolidarse como un proyecto musical altamente diferenciado en el ecosistema nacional para atraer a amantes de la música al medio rural.
Próximamente, se celebrará una edición especial de otoño con una colección de 5 conciertos desde el 1 al 3 de noviembre en un entorno único para conectar con la música y con la naturaleza.
Pastores del siglo XXI
Existe una asociación de mujeres, jóvenes, con un alto nivel cultural que han decidido cambiar la ciudad por el entorno rural. Yas, Cris, Carme y Sara son cuatro mujeres que pertenecen a la red ‘Ramaderes de Catalunya’, un grupo de 60 mujeres que trabajan por visibilizar la ganadería extensible.
Apuestan por la venta de proximidad. Se trata de una alternativa económica para las pequeñas empresas de ganadería y agricultura, que venden directamente sus productos a los clientes finales de su zona.
Este proyecto es otra forma de volver a los pueblos, optando por los negocios de toda la vida, especializados en la ganadería y la agricultura; es una manera de volver a los orígenes por parte de quienes deciden deshacerse de todo lo que tienen en la ciudad y volver al campo para vivir con lo que realmente necesitan y les hace felices.
Fanzara, modernismo y tradición
Fanzara es un pueblo de la provincia de Castellón que decidido reinventarse para atraer a nuevos habitantes y evitar que la localidad quede deshabitada en los próximos años. Desde hace un lustro, en este pequeño municipio conviven grafiteros y paisanos, la modernidad del mejor arte urbano con la tradición rural más arraigada para celebrar el festival MIAU, un museo inacabado que ha llenado el pueblo de obras de arte y ha recuperado la armonía.
Los 281 habitantes censados en Fanzara estuvieron de acuerdo en hacer de su pueblo un museo gratuito, sin tickets, sin puertas… tan solo utilizando las fachadas de sus casas para plasmar el arte y transmitir una idea a todos los visitantes de la localidad castellonense. Artistas de todo el mundo llegaron a Fanzara para realizar sus obras en el municipio hace 5 años con el fin de atraer visitantes y, además, recuperar la convivencia entre algunos vecinos que se había roto por el proyecto de crear un vertedero. Los vecinos del pueblo salieron ganando cuando cambiaron el plan basurero por el museo al aire libre.
Como es normal, los inicios no fueron fáciles y tardaron años en encontrar a artistas que quisieran colaborar. Los vecinos tampoco estaban muy convencidos, pero al ver la calidad de las obras, fueron muchos los que se sumaron a la causa cediendo las fachadas de sus hogares para crear arte. En las paredes de Fanzara puedes ver pinturas de Deih; Julieta Xlf; Escif, ‘el banksy valenciano’; Hombrelópez o Susie Hammer, entre otros.
Como estos, existen infinidad de proyectos que intentan apostar por el medio como lugar para vivir y trabajar. El Estado, por su parte, apuesta por los negocios rurales con sus ayudas para fomentar el emprendimiento rural.
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