Concurso de acreedores express: qué es y para qué sirve


Una crisis económica, un aumento de costes, (debido a un conflicto como el de Ucrania), la caída de ventas de un sector u otras dificultades pueden llevarse por delante la viabilidad de una empresa. La compañía se encuentra sin capacidad de responder a sus deudas con los acreedores.

En estos casos, existe una figura legal especialmente diseñada para aquellas empresas que no tengan activos y no tengan la posibilidad de enfrentarse a sus obligaciones financieras ni a corto ni a largo plazo: el concurso de acreedores express.

El concurso de acreedores express, o concurso exprés, permite liquidar y extinguir la sociedad de una sola vez, con un importante ahorro de costes, de tiempo y de energía.

Con esta fórmula se reconoce la imposibilidad de la empresa de enfrentarse a sus obligaciones financieras y, por lo tanto, se posibilita que a la declaración del concurso se una su conclusión inmediata.

Se trata una modalidad de concurso con muchas ventajas, la principal: el ahorro económico que supone. Vamos a ver en qué consiste de manera detallada y cuáles son los requisitos que tiene que cumplir una empresa para poder acceder a este procedimiento express.

¿En qué consiste el concurso de acreedores express?

Cuando se compromete la viabilidad de la empresa, los acreedores van a intentar recuperar su dinero, sin embargo, puede que la compañía no tenga posibilidad real de devolver sus deudas y, en ese caso, podría —si cumple una serie de requisitos— acogerse a un concurso de acreedores express.

¡Cuidado! No estamos hablando de la Ley de Segunda Oportunidad. Un concurso de acreedores, en términos generales, es un procedimiento judicial en el que, por problemas de liquidez o de solvencia, una empresa se declara incapaz de hacer frente a sus obligaciones

Lo regula la Ley Concursal e incluye una modalidad “express”.

A través de este instrumento jurídico se intentan devolver las deudas que aplican al patrimonio del deudor y se evita que exista una satisfacción preferente de unos acreedores sobre otros, permitiendo una distribución equitativa de la cuantía existente.

¿Qué tiene de especial un concurso de acreedores express? Básicamente, el Real Decreto Legislativo 1/2020, de 5 de mayo, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley Concursal, prevé el “concurso exprés” para evitar que se abra el procedimiento concursal que ya se prevé fallido.

O, lo que es lo mismo, si el juez aprecia que los bienes de la empresa son claramente insuficientes para hacer frente a sus deudas puede prever que, en efecto, el concurso de acreedores será fallido y no tendría sentido pasar por todo un procedimiento largo y costoso que llevaría al mismo resultado.

Es evidente que un procedimiento de liquidación no puede prosperar si no hay nada que liquidar. Por ello, el concurso de acreedores express permite conseguir en un solo procedimiento la declaración del concurso y su conclusión, así como la extinción de la empresa.

En cristiano, evita a empresa y acreedores pasar por todas las fases del procedimiento concursal.

Por lo tanto, el concurso empieza y termina en el mismo momento, sin embargo, no todas las empresas, y no en todas las circunstancias, podemos requerir este procedimiento. ¿Cuáles son los requisitos para que se reconozca el derecho a concurso de acreedores express?

Requisitos del concurso de acreedores express

Para poder acogerse a un concurso de acreedores express hay que cumplir una serie de requisitos referidos a la situación de la empresa, que recoge en el artículo 470 del Real Decreto Legislativo 1/2020, que dice:

El juez podrá acordar en el mismo auto de declaración de concurso la conclusión del procedimiento cuando aprecie de manera evidente que la masa activa presumiblemente será insuficiente para la satisfacción de los posibles gastos del procedimiento, y, además, que no es previsible el ejercicio de acciones de reintegración o de responsabilidad de terceros ni la calificación del concurso como culpable”.

Es decir, la ley dispone que el juez debe tener indicios claros de:

  • La sociedad debe carecer de activos suficientes para poder satisfacer los créditos contra la masa. Le ahogan las deudas. La masa activa es insuficiente para pagar los costes del procedimiento, es decir, que la empresa no tiene bienes y derechos para hacer frente a estos costes. Para demostrarlo, hay que entregar todos los documentos necesarios para que la autoridad judicial pueda declarar la insolvencia.
  • No son previsibles acciones de reintegración o responsabilidad de terceros a la masa del concurso. Si fuera posible, el patrimonio del insolvente podría aumentar, siendo la reintegración un mecanismo que devuelve al concurso todos los derechos o bienes que salieron del patrimonio.
  • No es previsible que se declare la culpabilidad del concurso. El concurso se consideraría culpable cuando el estado de insolvencia es consecuencia de comportamientos dolosos o por culpa grave del deudor.

Así, si el juez certifica que se dan estas condiciones, aceptará la solicitud de concurso de acreedores express, que le permitirá declarar la conclusión del concurso simultáneamente, y dará lugar a la liquidación y extinción de la empresa en el mismo trámite.

Por lo tanto, si es el caso de tu empresa, no dudes en solicitar esta modalidad de concurso de acreedores, te ahorrará dinero y dolores de cabeza. Pero, además de conocer las ventajas del concurso express, es importante tener en cuenta su precio: ¿Cuánto cuesta un concurso de acreedores express?

Precio del concurso de acreedores express

En comparación con un concurso de acreedores ordinario, el concurso express te va a permitir ahorrar mucho dinero. Su coste es menor: como ya hemos visto, es un proceso menos costoso y más rápido.

Sin embargo, eso no significa que salga gratis, pues hay que contar con los gastos necesarios para pagara a abogado y procurador, con sus correspondientes honorarios que pueden depender del volumen de la deuda.

La ventaja es que este procedimiento no necesita de administrador concursal y de otra serie de elementos que habría que pagar en el caso de un concurso ordinario. Por lo tanto, solo tendrás que contar con el coste de esas dos figuras fundamentales: abogado y procurador.

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