Alquiler de tecnología: Beneficios del renting tecnológico
15 Julio 2022 17:00
La tecnología se ha convertido en una parte imprescindible de nuestras vidas. A nivel personal, cuesta imaginar a alguien que no disponga de un smartphone, un ordenador en casa, etc.
Por supuesto, esto se extiende al ámbito laboral. Las empresas necesitan contar con un equipo de dispositivos tecnológicos para llevar a cabo sus tareas.
En este sentido, surge una modalidad de “alquiler” denominada renting tecnológico. Te explicamos a continuación qué es y cuáles son sus ventajas.
Qué es el renting tecnológico
Frente al modelo de compra habitual, el renting tecnológico es una modalidad de alquiler. Se basa en un pago mensual que incluye el uso del equipamiento alquilado y sus complementos, mantenimiento, seguro, etc.
Es decir, algo similar al renting de coches, concepto que quizás te resulte más familiar.Ten presente que la tecnología avanza a pasos agigantados. Es un motivo por el que la compra de determinados equipos puede no resultar rentable.
En este sentido, el renting tecnológico puede resultar útil, puesto que se firma un contrato por una cantidad de tiempo determinada. Una vez finalizado este tiempo, se puede continuar con el acuerdo mensual, pero con la posibilidad de renovar el equipo.
Con renting y con posibilidad de compra. Sería una buena opción para la gente que no tiene ordenador y que quiere hacerse con un ordenador a un precio asequible.
Como ya hemos visto, una de las principales ventajas que ofrece este tipo de acuerdo es el ahorro. Comprar equipamiento supone un gran desembolso, al que habría que sumarle el coste de mantenimiento. Una vez obsoleto este equipo, toca gastar de nuevo.
El alquiler de tecnología te permite unificar todos esos gastos en una única cuota. Por supuesto, cada autónomo o empresa debe hacer sus cuentas, ya que dependiendo del tipo de acuerdo y el equipo que necesites, los precios pueden variar.
La seguridad es otro de los beneficios que nos aporta el alquiler, principalmente si hablamos de renting tecnológico para autónomos, o incluso particulares. Estos, es probable que no puedan afrontar el gasto si se produce la rotura de su equipo de trabajo.
En cambio, si contratan el servicio de cualquier empresa de renting tecnológico. tendrán seguro y mantenimiento incluido. De esta forma evitan este tipo de contingencias.
La productividad se ve incrementada si acudimos a un renting, ya que este nos permite disponer de lo último del mercado. Pero, volviendo a la cuestión económica, el alquiler de tecnología es también una buena manera de controlar el gasto.
No olvides tampoco que los beneficios fiscales son los mismos, ya que puedes deducirte el IVA de cada factura mensual destinada a este acuerdo.
Qué incluyen los contratos de renting tecnológico
Llegados a este punto, si eres autónomo, tienes una empresa, o inclusive como particular, probablemente esto del alquiler tecnológico te esté resultando bastante interesante.
Lo cierto es que lo es, pero no olvidemos que implica la firma de un contrato. Antes de hacerlo, hay que revisar muy bien todas las cláusulas que aparezcan en él.
A priori, los contratos de renting de tecnología te dan la opción de alquilar e incluir el mantenimiento de ordenadores, tablets, routers, impresoras, dispositivos de software, etc.
En definitiva, todo o casi todo lo necesario para poner a funcionar una oficina u otro tipo de negocio. Pero antes de firmar, hay una serie de cosas que debes tener claras.
Principalmente, te recomendamos que hagas una lista de todas y cada una de las cosas que vayas a necesitar. Si te ofrecen algo muy por encima de lo necesario, estarías gastando de más, algo muy poco rentable para tu negocio.
Además, y sobre todo en lo que se refiere al mantenimiento, revisa muy bien las cláusulas del contrato, especialmente las exclusiones. Tendrás que valorar las posibilidades reales de que te pase algo que el renting no cubra y si puedes hacerte cargo.
El periodo de tiempo suele estar entre 1 y 3 años, con la ventaja de poder renovarlo cuantas veces quieras siempre que ambas partes estéis de acuerdo. Fíjate en las posibilidades de sustituir el equipo por uno nuevo cuando el contrato finalice.
Estos acuerdos suelen dar la opción de ampliación en cualquier momento. Si tienes alguna duda respecto al equipo que vas a necesitar, quizás te convenga empezar con menos. Luego puedes ir sumando servicios en función de tus necesidades.
Dónde acudir para un contrato de renting tecnológico
Esto dependerá en parte de si lo que necesitas en un renting para particulares, como autónomo o empresa. Por otro lado, el presupuesto es otro de los factores clave.
Si este es más limitado, tendrás que acudir a una entidad que te ofrezca una menor mensualidad, seguramente teniendo que renunciar a algunos servicios. Algunos bancos, por ejemplo, ofrecen este servicio de alquiler, incluso para particulares.
Pero, además, hay algunas empresas especializadas cuya ventaja principal es que tienden a ofrecer contratos algo más completos, así como específicamente adaptados a las necesidades de cada cliente.
IT Renting, es una de las opciones. Tiene contratos de entre 24 y 60 meses, y los ofrece por una cantidad mínima de 3000 euros + IVA. Microblau, es otra de las empresas especializadas, e incluye hardware, software e instalación a partir de 1.000 euros.
Una de las más completas, aunque también más cara, es BLB Renting, que da opción de equipos de lo más completos (ordenadores, impresoras, smartphones, software…). Además del equipo y mantenimiento, ofrece ocuparse de las gestiones.
Esta última es una buena opción si tu facturación es alta, mientras que las anteriores lo son en caso de que seas autónomo o tengas una pyme con una facturación más reducida.
Todo depende, como indicábamos antes, de tus necesidades. Lo que indudable, es que el renting tecnológico es una opción rentable.
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