Tras la nueva Reforma Laboral, el Ministerio de Trabajo ha aprobado el Estatuto del Becario, orientado a mejorar la situación de los trabajadores universitarios en prácticas.
Con esta nueva ley, se pretende acabar con lo que se consideran prácticas abusivas, mejorando la calidad laboral de la figura del becario.
Lo cierto es que ser becario en España, implica peores condiciones laborales que en otros países del mundo.
Por ese motivo, el Ministerio de Trabajo ha propuesto la aprobación de esta nueva normativa, que entre otras cosas aborda cuestiones como la cotización, la no remuneración o el coste del transporte. Pero, ¿qué consecuencias tendrá para los negocios?
Muchos vemos la figura del Becario como una persona joven que se encuentra trabajando en una empresa en lo que se considera un periodo de formación.
Sin embargo, se trata de una figura algo más compleja, que además puede enfrentarse a situaciones muy diferentes dependiendo de dónde realice las prácticas.
Realmente, el becario es un estudiante universitario que, antes de finalizar su formación, realiza tareas supervisadas en una empresa como parte de esta. El problema es que generalmente es un trabajo sin remunerar.
No obstante, hay ámbitos laborales como, por ejemplo, el periodismo, donde sí reciben una pequeña compensación económica por su trabajo.
El becario, dentro de la empresa donde realice las prácticas, debe contar con la figura del tutor. Esta persona se encarga de instruirle en las tareas que se le asignen, así como de evaluar su rendimiento y evolución.
El Estatuto del Becario propuesto en 2022 está motivado por la polémica que gira entorno a esta controvertida figura. Un informe de la OCDE sitúa a España como uno de los países donde los becarios gozan de peores condiciones.
Por ejemplo, se estima que alrededor del 70% de los trabajadores en prácticas no consiguen un contrato en la misma empresa cuando finalizan.
Esta negativa situación se extiende también a la remuneración, ya que en muchos casos las prácticas realizadas no implican ningún tipo de compensación económica.
Por otro lado, las voces más críticas acusan a algunas empresas de aprovechar la figura del becario para conseguir mano de obra barata o directamente sin coste.
El Estatuto del Becario, por tanto, se propone para corregir este tipo de prácticas ampliando los derechos de los estudiantes en cuestiones como la limitación del horario laboral o la mejora de las condiciones económicas.
Tanto si eres estudiante como si estás al frente de un negocio, te conviene seguir leyendo, ya que vamos a explicarte cuáles son las reformas más importantes que plantea el Estatuto del Becario.
Cabe recordar que, actualmente, y aunque se alcanzara un acuerdo entre el Ministerio y los sindicatos, el texto sigue abierto a modificaciones.
Todo esto, sin olvidar que las empresas tendrán la obligación de garantizar que el becario recibe una formación de calidad durante el tiempo que pase trabajando, y que por supuesto se ajuste al plan de estudios. Por otro lado, tendrá que garantizar la presencia equilibrada de hombres y mujeres.
Sobre la aprobación definitiva del Estatuto del Becario, es importante recordar que se encuentra pendiente de ser aprobado en consejo de ministros. Por tanto, todavía pueden producirse cambios con respecto a las claves actuales.
Además de la posibilidad de cambio, el Estatuto del Becario establecerá un plazo de 3 años para la aplicación de su normativa, de modo que actualmente siguen vigentes las medidas anteriores sobre el trabajo de los becarios.
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