Coste de oportunidad: qué es, tipos y cómo calcularlo


El concepto de coste de oportunidad es muy fácil de entender y extremadamente útil en economía. Partiendo de la definición de la ciencia económica podemos comprender qué es el coste de oportunidad.

La economía es la ciencia que estudia cómo gestionar recursos escasos para satisfacer necesidades y deseos ilimitados. ¿Cómo hacer tal cosa? Pues tratando de invertir esos recursos escasos en los usos más eficientes y con mayor retorno o recompensa.

La clave para entender el concepto de coste de oportunidad es darse cuenta de que en cualquier economía (ya sea la economía de un país, de una empresa o de una familia), los recursos son limitados y los deseos ilimitados.

Qué es el coste de oportunidad y por qué es tan importante para la economía de tu negocio

El coste de oportunidad es el coste en el que incurre un agente cuando invierte sus recursos limitados en una opción y renuncia a las alternativas. Aquello a lo que renunciamos cuando tomamos una decisión económica.

Es decir, representa el coste al que se enfrenta cualquier persona o empresa que tome una decisión: el coste de oportunidad es el valor de todo aquello a lo que renuncia en esa elección.

El valor de la mejor opción no realizada. Así lo definió el austriaco Friedrich von Wieser, que acuñó el término en 1914 en su obra Teoría de la Economía Social.

Por ejemplo, cuando un niño que tiene 1€ decide comprar caramelos en el quiosco también se enfrenta a un coste de oportunidad. En este caso serán las piruletas, chupachups, gominolas, gusanitos y el resto de productos a los que renuncia para poder comprar los caramelos.

De igual forma, cuando un emprendedor dedica un dinero al alquiler de un local para su negocio –pongamos 800 euros mensuales– está renunciando a numerosas alternativas de gasto e inversión a las que podría dedicar ese dinero.

Precisamente, las alternativas al alquiler del local con esos 800 euros representan el coste de oportunidad. Es el coste de haber elegido una opción sobre otra (alquiler de una oficina frente a compra de un equipo de trabajo portátil e inversión en el desarrollo de un nuevo producto con esos 800 euros mensuales).

Las decisiones empresariales provocan numerosas consecuencias: ganancias, pérdidas y costes de oportunidad, precisamente, porque los recursos de una empresa son limitados.

El coste de oportunidad también podría ser un cómic, un libro o el rendimiento del ahorro, que euro a euro podría alcanzar cierta rentabilidad o permitir al niño comprar una bici al cabo de cierto tiempo.

El coste de oportunidad es el coste en el que incurrimos cuando desechamos una alternativa para tomar una decisión e incluye los beneficios que habríamos obtenido si hubiéramos optado por otro camino.

Entonces ¿por qué es importante el coste de oportunidad? El coste de oportunidad es un concepto clave para cualquier toma de decisiones económicas, ya sea de una familia, de un autónomo o de una pequeña empresa.

Cuando los recursos son limitados, las empresas se enfrentan cada día a disyuntivas en las que tienen que tomar decisiones: ¿Alquilar un local o invertir ese dinero en el desarrollo de un nuevo producto?

¿Contratar a un empleado o comprar nuevos equipos informáticos? ¿Invertir en publicidad o contratar un community manager?

Los ejemplos de costes de oportunidad son infinitos e incurrimos en ellos a diario. Por eso, es fundamental conocer el concepto de coste de oportunidad y saber calcularlo para tenerlo siempre en cuenta en tus decisiones económicas.

Tipos de coste de oportunidad

En economía se estudian dos tipos de costes de oportunidad: constantes y crecientes, que analizan si aquella alternativa a la que renuncias te provoca un coste o pérdida de ganancias constantes o crecientes.

Si una empresa dedica sus factores de producción, por ejemplo, a la fabricación de tabletas de chocolate y renuncia a usar esos factores (leche y cacao) para fabricar yogures, está incurriendo en un coste de oportunidad.

¿Cómo es ese coste de oportunidad, creciente o constante? Los costes de oportunidad crecientes se dan cuando la fabricación del producto elegido (tabletas de chocolate) se hace con recursos no homogéneos que no se encuentran en la misma proporción.

Los costes de oportunidad crecientes se dan, por lo tanto, porque los recursos o factores de producción se van haciendo ineficientes según aumenta la producción (y, por tanto, haber tomado esa decisión provoca incurrir en costes cada vez mayores).

Es lo que en economía se señala con una frontera de producción cóncava. Por el contrario, los costes de oportunidad constantes se dan cuando los factores productivos son sustitutos perfectos o son iguales.

Los costes de oportunidad son constantes porque la elección obliga a renunciar siempre a la misma cantidad de una mercancía para producir una unidad adicional de tabletas de chocolate.

Cómo calcular el coste de oportunidad

El coste de oportunidad es muy sencillo de calcular. Solo hay que aplicar la siguiente fórmula:

Coste de oportunidad opción B (producto B, inversión B) = valor de la opción A (producto A, inversión A) – valor de la opción B (producto B, inversión B).

En función de cuál es la decisión económica sobre la que quieras conocer su coste de oportunidad, tendrás que aplicar unas u otras cuentas, pero en todos los casos se tiene que aplicar esta misma fórmula al final.

En el caso de una inversión habría que calcular el valor futuro de cada una de las inversiones para compararlo y hacer esa resta.

Otro caso muy repetido: ¿Alquilo un piso o compro una vivienda? Si alquilas el piso, pongamos, a 1.000 euros al mes, podemos calcular el coste de oportunidad en 20 años conociendo el precio de la vivienda y teniendo en cuenta amortizaciones, intereses de la deuda hipotecaria, etc.

Independientemente de cuál sea el análisis económico que tengas que hacer, el cálculo del coste de oportunidad es una herramienta muy útil como brújula en la toma de decisiones.

En Yoigo Negocios te explicamos los términos más importantes que debes dominar para gestionar bien tu empresa, como el coste de oportunidad. Si tienes alguna duda, visita nuestra web o llámanos al 900 622 500 y déjanos ayudarte.