5 consejos para fijar el horario laboral de tu negocio


Las opciones para fijar un horario laboral son muchísimas y se han expandido aún más con Internet, el comercio electrónico y la transformación digital en general.

Desde el horario típico de atención al cliente de mañana y tarde hasta horarios flexibles con diferentes opciones para los trabajadores e, incluso, posibilidades de realizar días o semanas intensivas.

Las posibilidades son infinitas y aunque casi todo el mundo desea lo que vulgarmente se conoce como ‘horario de oficina’, de 8:00h a 15:00h, la realidad es que la jornada depende de múltiples factores que hay que tener en cuenta.

Consideraciones previas para fijar el horario laboral de tu negocio

Para establecer el horario laboral tienes que considerar las principales variables: sector, tipo de negocio, ubicación geográfica del local físico (si lo hay), horario de la competencia, patrones de consumo de los clientes, etc.

Por eso no es tan fácil como parece. Sobre todo si quieres acertar con un horario que cubra las necesidades de los clientes y, al mismo tiempo, mantenga contentos a los empleados.

Y, todo ello, sin olvidarte de un elemento fundamental en el establecimiento de horarios: la maximización del beneficio y reducción de costes. ¿Cómo fijar el horario de mi empresa o negocio teniendo en cuenta todos esos factores?

Te damos cinco consejos clave para fijar el mejor horario laboral posible en tu negocio, en función de tus circunstancias y características concretas de la empresa.

Básate en la experiencia y en la competencia

Lo primero es obvio, pero clave: para fijar el horario laboral de tu negocio debes basarte en la experiencia. Ni estadísticas ni estudios sobre el comportamiento del consumidor serán tan útiles como tu experiencia.

Lo primero es tener claro cuándo, sí o sí, tiene que estar abierto tu negocio. Y eso depende del sector y de las necesidades de los clientes potenciales a los que te quieres dirigir, pero sobre todo te lo dice la experiencia.

No es lo mismo que tu negocio sea un bar que una librería. Pero tampoco es lo mismo si es un local en Madrid o Barcelona, o en Albacete o Teruel. En la capital tendrías una alta demanda a las 15h, mientras que en una localidad más pequeña estarías más libre.

Por eso hay que considerar todos los determinantes y eso solo te lo puede dar la experiencia, dado que cada negocio es único, y con una casuística concreta.

En ese sentido, tampoco es lo mismo tener un negocio con un local físico en un centro comercial que en una calle comercial de una ciudad pequeña. El primero, seguramente, requiera un mayor número de horas abierto y disponible por el flujo de clientes.

Si tu negocio ya lleva tiempo abierto, lo mejor es que te fijes en las costumbres de los clientes, de tu competencia y de la zona en la que está ubicado tu negocio.

Elige un horario de apertura con contexto

Partiendo de ese análisis de la experiencia, debes tener siempre presente que tu negocio debe tener un horario laboral que le permita estar disponible para tus clientes al menos tanto como la competencia.

También debes asegurarte de que tu negocio está abierto 9 de cada 10 veces que un cliente se acerca o espera encontrarlo abierto (en el caso de un neogico con un local físico).

Es decir, que la competencia y la clientela son dos pilares de la elección del horario laboral al que hay que añadir un tercero: los empleados.

En el caso de que no tuvieras restricciones físicas porque manejes un negocio 100% digital con toda la actividad online, el análisis cambiaría radicalmente y, solo en ese caso, los empleados y su productividad pasarían a ser la clave.

Pon las necesidades de los clientes en el centro

A no ser que tengas un negocio 100% online, para fijar el horario laboral debes tener en cuenta las pautas y costumbres de consumo de tus clientes actuales y potenciales.

En la toma de decisiones sobre horarios laborales y comerciales, este siempre debe de estar en el centro. Al fin y al cabo de él dependes para mantener la facturación ¿no?

Ningún negocio debería enfrentarse a una situación en la que decenas de clientes intentan acceder a una hora determinada a la que esperaban que estuviera abierto… pero no lo estaba.

Cuanto más disponible esté tu negocio mayor será la satisfacción del cliente y mejores tus cifras de venta. Sin embargo, no puedes estar abierto 24 horas si no lo compensa el análisis coste/beneficio. Por eso, es fundamental realizarlo.

Una vez comparados los costes y beneficios de abrir a ciertas horas del día, lo natural es que tus horarios sean bastante parecidos a los de tu competencia y/o a los de tu ubicación.

Por eso, aunque las necesidades y patrones de consumo de tus clientes deben pesar más en tu decisión, es fundamental que incluyas en la balanza otras consideraciones como los costes laborales, de luz y agua, etc.

Cuida a tus empleados

Para fijar un horario en tu establecimiento es fundamental que tengas en cuenta a tus empleados. De hecho, podríamos decir que son la otra cara de la moneda para tomar la decisión sobre el horario laboral.

Es fundamental que tu negocio esté abierto a las horas de máxima demanda y de demanda media de tus productos, pero también es necesario que tus trabajadores estén contentos y satisfechos.

Por eso, tendrás que medir muy bien los costes laborales y tener en cuenta que horarios en festivos o noches deben pagarse mejor. En muchos casos, las ventas compensarán este coste con creces.

En otros, el peso de los costes laborales te forzará a tener que elegir un horario más conservador, pero más garantista para ti y tus empleados.

Lo que debes tener muy claro cuando fijes el horario laboral para tu empresa es que existen fórmulas suficientes como para poder satisfacer las necesidades de tu negocio a la par que satisfacen a los trabajadores.

Horario partido, flexible, de mañana o de tarde, intensivo… Son muchas las fórmulas; la lista sigue y sigue. Pero cuidado, porque no hay un modelo mejor que otro; depende de tus necesidades.

Fíjate objetivos y piensa cuántos trabajadores necesitas para cumplirlos. Considera cuáles son los mejores horarios para el negocio y para ellos. Reparte los peores horarios entre varios y sé flexible siempre que puedas.

No olvides que debes cuidar a tus empleados si quieres cosechar unos buenos resultados. Trabajadores satisfechos son trabajadores productivos y resolutivos.

Abraza la flexibilidad

Como adelantábamos antes, la flexibilidad en los horarios laborales de tu negocio es un puntal crítico para la viabilidad general del mismo.

Puede que el negocio no pueda tener un horario flexible y abrir cada día a una hora, pero en función de la empresa y el producto o servicio que ofrece sí se puede encontrar un espacio enorme de flexibilidad.

Así, siempre hay momentos en el día y periodos a lo largo del año que acumulan una mayor intensidad de trabajo, clientes o actividad en general.

Por ejemplo, en el comercio, las campañas navideñas, o en actividades estacionales el verano o el invierno, ciertas campañas de rebajas, fiestas, vacaciones, etc.

Cada negocio tiene su casuística, pero tener un horario laboral flexible es un win-win de manual. Es decir, ganas tú y tu negocio y, a su vez, gana el trabajador.

No olvides el eCommerce

Por último, debes tener muy en cuenta que vivimos en la era digital y que, sea cual sea tu negocio, deberías plantearte tener una presencia online potente.

En función del sector de actividad, evidentemente, podrás basarte en Internet en mayor o menor medida, pero en caso de que puedas mantener tu actividad online, las restricciones para fijar el horario laboral de tu negocio serán mucho menores.

¿Ya tienes tu horario laboral establecido? Recuerda mantenerte al día e ir adaptando esta estrategia a cada momento. Entra en nuestra web o llama al 900 622 500 y deja que te ayudemos con conectividad desde Yoigo Negocios.